¿Los perros pueden comer manzana? La respuesta de una veterinaria
La manzana no solo es conocida por ser un símbolo de la tentación en la Bíblia con Adán y Eva y de la maldad en el cuento de Blancanieves y los siete enanitos, sino que también es famosa por ser muy beneficiosa para la salud, pues el propio refrán lo dice: “an apple a day keeps the doctor away”, lo que se traduce como “una manzana al día mantiene al doctor en la lejanía”.
Su pulpa, harinosa o crujiente, tiene un sabor que varía entre el dulce y el ácido. Su piel, lisa y brillante, puede ser de diferentes colores: verde, roja, amarilla y bicolor. Aunque solo disponemos de media docena en el mercado, existen más de mil variedades y las encontrarás desde septiembre hasta junio, sin embargo las variedades Golden se cultivan prácticamente todo el año.
¿Tienes curiosidad por saber si los perros pueden sacar partido de esta fantástica fruta? Pues quédate a leer este artículo sobre la manzana para perros, ¡no tiene desperdicio!
¿Los perros pueden comer manzana?
Sí, los perros pueden comer manzana de forma esporádica y en pequeñas cantidades. Pueden comerla cruda o cocida, con o sin piel, siempre retirando el corazón y las semillas, y cortada en pedazos.
¿Y la piel?
Sí, los perros pueden comer la piel de las manzanas, siempre lavada previamente. Ésta le será beneficiosa si tu perro está estreñido por su elevado contenido en fibra.
Beneficios de la manzana para los perros
La manzana es una fruta muy nutritiva y es conocida por sus múltiples beneficios. Estos son algunos de sus componentes saludables:
- Agua: refresca e hidrata.
- Hidratos de carbono: proporcionan energía para el funcionamiento del organismo.
- Calorías: aporta 53 Kcal/100 g de porción comestible, lo que la convierte en una snack apto para animales que deben perder peso.
- Vitaminas: destacan la vitamina C, A y ácido fólico, importantes para reforzar las defensas y mejorar la visión y el crecimiento, entre otros.
- Minerales: la manzana elimina el sodio de la sangre y lo sustituye por potasio, favoreciendo la presión arterial y mejorando el funcionamiento del corazón. Su contenido en fósforo tiene efectos relajantes, ayudando a dormir mejor. También contiene calcio y magnesio.
- Fuente de pectina: es una fibra vegetal insoluble detoxificante que facilita la eliminación de toxinas junto a las heces. Ayuda en trastornos digestivos ya que regula la función intestinal y favorece en casos de estreñimiento y diarrea, aunque parezca contradictorio, actuando como laxante suave, especialmente en ayunas, y como astringente absorbiendo líquidos. También reduce los niveles de colesterol en sangre favoreciendo la salud cardiovascular.
- Ácidos orgánicos: el más abundante es el ácido málico. Éstos regeneran la flora bacteriana normal intestinal. Además, junto con su contenido de cistina y arginina, dos aminoácidos, evitan la retención de líquidos aportando un efecto diurético y depurativo.
- Taninos: es una de las frutas más ricas en taninos, unas sustancias naturales en las plantas, que tienen efecto astringente y antiinflamatorio del intestino.
- Flavonoides: se trata de unos químicos vegetales con capacidad antioxidante que, entre otras propiedades, impiden que el colesterol se deposite en las arterias evitando la arteriosclerosis, que es el endurecimiento y estrechamiento de las arterias. Además, reducen el riesgo de desarrollar cáncer de colon. El más abundante es la quercetina. Las procianidinas, otro tipo de flavonoide, también modulan la función inmunitaria y activan las plaquetas, importantes para la cicatrización y evitar hemorragias.
- Otros: ayuda en trastornos del hígado como presencia de cálculos biliares por su acción colerética, es decir, provoca que el hígado segregue bilis, y también es beneficiosa para la salud urinaria de los Dálmatas, que tienen un mecanismo defectuoso para excretar ácido úrico, ayudándoles a eliminarlo [1, 2].
¿Cuáles son los riesgos de dar manzanas a tu perro?
El corazón de la manzana y las semillas
El corazón de la manzana es duro y consistente, pudiendo producir ahogamiento si se queda atascado en vías respiratorias u obstrucción intestinal si se atora en vías digestivas, poniendo en riesgo la vida del can.
Asimismo, el corazón contiene semillas con amigdalina, una molécula que tras su ingesta se convierte en cianuro, una sustancia potencialmente tóxica para el organismo de los perros, especialmente para el sistema nervioso. Ésta se encuentra en pequeñas cantidades pero, si ingiere una elevada cantidad de semillas de manzana, podría suponer un grave peligro para su vida.
Manzanas no maduras
Las manzanas inmaduras son más duras lo que puede dificultar su ingesta al producir dolor en las encías al morderla. Además, puede costar masticarla aumentando el riesgo de que trague un trozo muy grande y quede atorado, generando asfixia u obstrucción intestinal.
Manzanas enlatadas
Los perros pueden comer manzana enlatada pero no el líquido que la contiene, ya que ese almíbar está compuesto por conservantes y azúcares añadidos totalmente desaconsejados para tu mascota.
Especias y condimentos
Los perros pueden comer manzana fresca y natural, sin sazonar ni añadir, por ejemplo, azúcar por encima ya que dejaría de ser saludable para ellos.
Manzanas que crecen en tu jardín
Estas manzanas son seguras para tu mascota pero el riesgo se encuentra en las ramas del manzano, ya que si las mordisquea pueden formarse astillas que podrían dañar su boca y sistema digestivo al tragarlas. Además, las hojas contienen amigdalina, como las semillas, que ya hemos comentado que, en grandes cantidades, es potencialmente tóxica.
Perros con problemas de salud
Algunos perros pueden mostrar intolerancia a algunos alimentos. Si tu perro ha comido manzana en varias ocasiones y ha experimentado vómitos, diarreas o heces blandas en todas ellas, evita darle esta fruta pues son signos de intolerancia alimentaria.
¿Cómo darle manzana a tu perro de manera segura?
Hay diferentes formas de consumir esta fruta:
- Cruda: preferiblemente pelada ya que la piel es de más difícil digestión, además de que puede contener plaguicidas.
- Rallada o picada: se puede hacer puré de manzana.
- Asada: es una forma sabrosa y digestiva de consumirla.
- Hervida: la cocción facilita su digestión.
Te dejamos una receta de galletas con manzana para que puedas innovar en su alimentación.
¿Cuántas manzanas puede comer tu perro?
Pese a que es una fruta saludable para tu perro, ofreceremos manzana de forma ocasional ya que se trata de un complemento de su dieta, no su fuente principal.
La cantidad siempre depende de su tamaño y de lo que haya comido ese día:
- Recomendamos que coman manzana entre dos y tres veces a la semana; en el caso de un perro de raza pequeña puede comer un cuarto de manzana por toma, un perro de raza mediana puede comer la mitad de una manzana y un perro de raza grande tres cuartos de manzana.
- Si ese día ha ingerido otros premios, deberemos reducir la porción de manzana que le ofrecemos, ya que los snacks deben representar como máximo el 10% de su alimentación diaria.
¿Qué hacer si tu perro come demasiadas manzanas?
Si tu perro ha comido una cantidad significativa de manzanas es importante mantenerlo en observación por si muestra síntomas como diarrea, vómitos, falta de apetito o dificultad para respirar. De ser así, llévale a su veterinario pues puede requerir un tratamiento específico para su mejora.
Déjalo en un espacio tranquilo para que pueda relajarse, ya que seguramente tenga dolor estomacal y necesite reposar.
Durante los siguientes días dale de comer únicamente dieta blanda a base de arroz hervido mezclado con alguna verdura hervida como por ejemplo zanahoria. Si ves que la tolera bien y no muestra signos gastrointestinales, reintroduce de nuevo su pienso habitual de forma progresiva. Para favorecer su recuperación puedes añadir probióticos en su dieta.
¿Son buenas las manzanas para perros con diarrea?
Sí, las manzanas son buenas para perros con diarrea. Las manzanas pueden ayudar a aliviar este signo clínico debido a su contenido en fibra, que ayuda a absorber agua y a estabilizar la consistencia de las heces.
Alternativas a las manzanas
Si a tu perro le encantan las frutas y verduras tienes miles de opciones para ofrecerle, como por ejemplo kiwi, coco, boniato o calabaza.
Preguntas frecuentes
¿Los perros pueden beber zumo de manzana?
No, los perros no deben beber zumo de manzana. El motivo es porque al exprimir las manzanas eliminamos gran parte de su fibra, la encargada de hacer que el azúcar se absorba más lentamente evitando los perjudiciales picos de glucosa en sangre, convirtiendo al zumo en un producto de alto índice glucémico que, además de inducir el sobrepeso, también es nocivo en perros diabéticos o con alteraciones pancreáticas.
Y si hablamos del zumo industrial, es aún más perjudicial por su conservantes y azúcares añadidos.
¿Los perros diabéticos pueden comer manzanas?
Sí, los perros diabéticos pueden comer manzana. Esto se explica por tres motivos:
- Gran parte de su azúcar está en forma de fructosa, que no requiere de insulina para metabolizarse.
- La pectina que contiene actúa como reguladora de asimilación de azúcar, permitiendo que su paso a la sangre sea lento y progresivo [1].
- Contienen floretina, un tipo de flavonoide exclusivo de las manzanas y sus derivados, con efecto antidiabético debido a su capacidad para limitar la absorción intestinal de glucosa [2].
¿Los perros pueden comer mermelada de manzana?
No, los perros no deben comer mermelada de manzana. En sí misma no es tóxica para los perros pero puede contener azúcares añadidos y otros ingredientes que pueden ser perjudiciales para su salud, como por ejemplo conservantes o, en mermeladas “sin azúcar”, un edulcorante artificial llamado xilitol, altamente tóxico para los perros porque les produce bajadas de glucosa drásticas que pueden, incluso, comprometer su vida.
¿Los perros pueden comer manzana cocida?
Sí, los perros pueden comer manzana cocida. Esta forma de cocinarla es beneficiosa para perros con un sistema digestivo delicado ya que facilita su digestión. Aunque tiene un inconveniente, y es que pierde parte de sus vitaminas durante la cocción, pero una forma de evitarlo es prepararla al vapor en lugar de hervirla.
¿Los perros pueden comer manzana deshidratada?
Sí, los perros pueden comer manzana deshidratada pero una cantidad mucho menor que si ingieren manzana fresca, ya que cada porción de manzana deshidratada concentra mucho más azúcar.
¿Los perros pueden comer manzana congelada?
Sí, los perros pueden comer manzana congelada. ¡Esta forma de dársela le encantará con la llegada del verano!
Conclusión
Los perros pueden comer manzana en pequeñas cantidades, convirtiéndose en una fuente adicional de vitaminas y fibra para su dieta. Es una fruta segura, que pueden comer lavada y troceada, con piel si está estreñido o pelada si tiene heces blandas. Retira el corazón y sus semillas antes de ofrecérsela. Úsala como una golosina ocasional pero no como fuente principal de alimento.
La manzana, popular por ser la fruta prohibida del Edén, dista mucho de ese significado por ser de gran utilidad para la salud. ¿Caerás en la tentación de darle manzana a tu perro? ¡Pruébalo y nos cuentas en comentarios!
Referencias
[1] Hidalgo Filipovich Rosario, Gómez Ugarte Magaly, Escalera Cruz David Ángel, Rojas Navi Patricia, Moya Santos Vanessa, Delgado Flores Paola et al . Beneficios de La Manzana (Malus Domestica) en la Salud. Rev. Inv. Inf. Salud [serial on the Internet]. 2016 [cited 2023 Jan 31] ; 11(28): 58-64. Available from: http://www.revistasbolivianas.ciencia.bo/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S2075-61942016000300009&lng=en.
[2] Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (31 de enero de 2023). Manzana (Malus pumila, Malus sylvestris mill). https://www.mapa.gob.es/es/ministerio/servicios/informacion/manzana_tcm30-103008.pdf
Helena es una amante de los animales desde bien pequeña, por ello, se graduó como veterinaria en la UAB. A lo largo de su carrera, realizó prácticas en varias clínicas de pequeños animales en Barcelona, su ciudad natal, y durante seis meses en la universidad de medicina veterinaria de Helsinki, la capital finlandesa. Además, realizó un voluntariado en un centro de recuperación de fauna silvestre en Costa Rica. Actualmente ejerce en un hospital veterinario atendiendo citas preventivas, casos crónicos de medicina interna y visitas de urgencia.