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¿Los perros pueden comer mandarinas? La respuesta de una veterinaria

mandarina

¿Sabías que las mandarinas reciben su nombre en honor al color naranja de la indumentaria que utilizaban los gobernantes de la antigua China, los mandarines? Pues esto no es lo único que aprenderás hoy si sigues leyendo este interesante artículo sobre esta dulce fruta.

¿Los perros pueden comer mandarinas?

Sí, los perros pueden comer mandarinas. Es una fruta saludable y segura para ellos.

¿Y las semillas?

No, los perros no deben comer las semillas de las mandarinas, y mucho menos en grandes cantidades, pues suponen un riesgo de obstrucción intestinal; además, al ser difíciles de digerir, les puede generar malestar abdominal. 

Beneficios de la mandarinas para los perros

Con respecto a los macronutrientes, la mandarina es una fruta que aporta energía en cantidades considerables, fibra en forma de pectina que favorece la salud digestiva, no tiene prácticamente nada de grasas y es muy hidratante.

En relación a los micronutrientes, es una buena fuente de potasio, vitaminas y flavonoides: 

  • Potasio: interviene en la actividad muscular y nerviosa.
  • Vitamina C: contiene menos vitamina C que las naranjas pero aún así, su aporte de esta vitamina es considerable. Es un antioxidante importante para el sistema inmune.
  • Vitamina B: es el cítrico con mayor cantidad de ácido fólico, un tipo de vitamina B, que favorece la salud sanguínea promoviendo la producción de glóbulos rojos y blancos. Son favorecedoras en casos de anemia y para reforzar las defensas.
  • Vitamina A: tiene un gran contenido de provitamina A y criptoxantina, un tipo de caroteno, ambos componentes se transforman en vitamina A. Ésta es muy beneficiosa para la salud visual.
  • Hesperidina: la hesperidina es un tipo de flavonoide con efectos antiinflamatorios, analgésicos, reductor de grasas, antihipertensivos y diuréticos.
  • D-limoneno: es un tipo de limonoide, una sustancia volátil responsable de su intenso aroma, considerado un importante agente anticancerígeno [1, 2].

¿Cuáles son los riesgos de dar mandarinas a tu perro?

Mandarinas no maduras

Las mandarinas inmaduras son más difíciles de digerir, causando molestias gástricas, flatulencias y pesadez. Además, sus nutrientes no se asimilan bien y su sabor ácido es desagradable.

Las mandarinas son una fruta no climatérica, es decir, una vez recolectada dejan de madurar, por eso deben ser recogidas en su punto óptimo de maduración. Por tanto, si cuando vas al mercado encuentras mandarinas con piel de color verde y dura al tacto, no las compres, pues no serán adecuadas para el consumo de tu can.

Mandarinas que crecen en tu jardín

Si tienes un mandarino en tu jardín, ándate con ojo para que tu perro no devore sus frutos, ya que su atractivo aroma seguro que llamará su atención. Si tu can logra alcanzar las mandarinas del árbol, existe el riesgo de que ingiera su piel y sus semillas, además de las ramas a las que se hallan enganchadas, pudiendo derivar en alteraciones gastrointestinales y lesiones a nivel bucal y digestivas. Asimismo, podrían ingerir la fruta en su forma inmadura y en grandes cantidades, suponiendo un peligro para su salud

Así que instala un vallado alrededor del mandarino para evitar todos estos peligros. 

Perros con problemas de salud

Si tu perro padece algún trastorno renal o enfermedad de Addison no recomendamos que le ofrezcas mandarinas debido al alto contenido en potasio de esta fruta. Esto se debe a que estas patologías predisponen al acúmulo de este electrolito en el organismo, aumentando el riesgo de hiperkalemia y sus consecuencias negativas a nivel cardíaco. 

Si tu mascota es intolerante o alérgica a la mandarina no debe comer esta fruta. Los signos clínicos que puede mostrar son urticaria, picazón, inflamación, dolor abdominal, vómitos o diarrea

¿Cómo darle mandarinas a tu perro de manera segura?

Pela bien la corteza de esta fruta y asegúrate de quitar todas las semillas antes de ofrecerle un gajo a tu perro.

No se la des exprimida, ya que de esa forma pierde su fibra generando picos de glucosa más altos en el organismo y perdiendo sus beneficios sobre la salud digestiva.

Antes de darle un gajo de mandarina, pruébala tú primero para comprobar que tiene un sabor dulce, ya que las que son más ácidas no suelen gustarle. Y escoge aquellas mandarinas que tengan un mayor peso, pues serán más jugosas. 

Si vas a introducir por primera vez está fruta en su dieta, hazlo de forma progresiva para poder valorar cómo reacciona su cuerpo y poder detectar si muestra algún signo de intolerancia alimentaria. 

¿Cuántas mandarinas puede comer tu perro?

Las mandarinas son una fruta cítrica con un nivel considerable de azúcar, por lo que deben ofrecerse de forma ocasional

Ya debes saber, como buen experto en alimentación en el que te has convertido tras leer nuestro artículos, los snacks no deben superar el 10% de la ingesta calórica diaria, de lo contrario, no estaríamos ofreciendo una dieta equilibrada a nuestro peludo.

Nuestro consejo es que le ofrezcas mandarina un máximo de tres veces por semana, combinándola con otras frutas y verduras. La cantidad a darle depende del tamaño del perro, pudiendo darle dos o tres gajos a un perro de raza pequeña, media mandarina a uno de raza mediana y una entera a uno de raza grande o gigante.

¿Qué hacer si tu perro come demasiadas mandarinas?

Si se da un atracón de mandarinas puntual, mantenlo en observación por si muestra signos de alteración digestiva como vómitos, diarrea o letargo. Si los síntomas son leves, puedes alimentarle unos días con dieta blanda o gastrointestinal para ayudar a su recuperación, pero si los síntomas son graves o no cesan, contacta con su veterinario para que le realice un chequeo médico y dictamine qué tratamiento requiere. 

Si de forma habitual consume muchas mandarinas esto puede ser perjudicial. Un consumo excesivo de ácido cítrico puede erosionar el esmalte de los dientes y provocar gastritis o inflamación del estómago, con el consecuente malestar abdominal, especialmente si padece algún tipo de sensibilidad digestiva. Así que sigue las recomendaciones que te hemos dado en el apartado anterior, y no le des más mandarina de lo que le toca.

Recuerda que la prevención es siempre la mejor opinión, así que mantén los alimentos fuera del alcance de tu perro. 

¿Son buenas las mandarinas para perros con diarrea?

No, las mandarinas no son un alimento adecuado para perros con diarrea. Pese a su contenido en fibra, las mandarinas contienen ácidos cítricos que pueden irritar aún más el sistema digestivo y agravar el cuadro de diarreas. Lo apropiado es que se alimenten con una dieta suave y fácil de digerir, compuesta por alimentos como arroz, zanahoria y pollo hervidos, para favorecer la recuperación del intestino.

¿Los perros diabéticos pueden comer mandarinas?

No, los perros diabéticos no deben consumir mandarinas. Para el manejo de la diabetes, es esencial el control y mantenimiento de unos niveles estables de azúcar en sangre, pero las mandarinas, por su alto contenido en azúcar libre, pueden aumentar la glucosa sanguínea de forma drástica y perjudicar a la salud de estos enfermos. 

Alternativas a las mandarinas

¿Estás buscando otro premio saludable para ofrecerle a tu perro? El melón, la sandía, el pepino o el tomate son unas excelentes alternativas, pero aquí dejamos una lista más extensa con más frutas y verduras para que le eches un vistazo.

Conclusión

Las mandarinas son una fruta sana y apta para perros. Es un snack fácil de proporcionar a tu can, ya que se pela en un segundo, y sus jugosos gajos están listos para degustar. Proporciona beneficios a nivel digestivo y visual, potencia sus defensas, y es muy hidratante. Deben comerla en su forma madura y en su justa medida, adecuada a su tamaño y su salud general.

Deja que tu perro olfatee un gajo de mandarina ¡y cuéntanos en comentarios si ha podido resistirse a probarlo!

Referencias

[1] Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (27 de junio de 2023). Mandarina, Mandarin (Citrus reticulata). https://www.mapa.gob.es/es/ministerio/servicios/informacion/mandarina_tcm30-102685.pdf 

[2] Leporini M, Loizzo MR, Sicari V, Pellicanò TM, Reitano A, Dugay A, Deguin B, Tundis R. Citrus × Clementina Hort. Juice Enriched with Its By-Products (Peels and Leaves): Chemical Composition, In Vitro Bioactivity, and Impact of Processing. Antioxidants. 2020; 9(4):298. https://doi.org/10.3390/antiox9040298

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