Rafeiro do alentejo

El Alentejo es una región del sur de Portugal, en la frontera con España, donde el clima en invierno es duro y helado, mientras que en verano es polvoriento y abrasador.

Estas terribles condiciones climáticas impusieron la necesidad de desplazar a los rebaños regularmente.

Estos desplazamientos se realizaban sobre todo entre el interior del Alentejo y la región norte del Duero, el ganado se desplazaba siempre, acompañado por los poderosos mastines, que los protegieron así durante siglos.

Los perros se fijaron así con la sedentarización y el asentamiento. Se dice que el Rafeiro do Alentejo apareció en la región, y su tarea era la de de proteger los rebaños de ovejas de múltiples depredadores.

Más tarde, se convirtió en uno de los perros preferidos para la protección y vigilancia de las grandes propiedades portuguesas.

En 1953 se creó el estándar oficial de la raza, gracias a dos cinólogos, Filipe Romeiras y Antonio Cabral. Esta raza autóctona casi desapareció por completo entre los años 60 y 80.

Sin embargo, algunos apasionados decidieron rescatar la raza para evitar así la extinción del Rafeiro do Alentejo.

Gracias a la perseverancia de estos apasionados criadores, que contaron con un gran apoyo del municipio de Monforte, la raza fue oficialmente reconocida por la FCI (Federación Cinológica Internacional), y ya no se considera hoy en día en peligro de extinción.

Este excelente perro de guardia y protección para las grandes casas y granjas de la región del Alentejo es muy apreciado en su región natal por ser pastor de rebaños, reciba o no la ayuda de su amo.

Este excelente perro de alarma también es un excelente compañero de vida. Cuando no se encuentra trabajando fuera para dirigir o proteger la manada o guardar de la tierra, hace feliz a toda su familia, protegiéndolos al mismo tiempo.