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Tibetan Terrier, Lhasa Terrier, Tibet Apso, Tsang Apso
Este perro sagrado es un animal muy espiritual para los tibetanos. Este protector de la ciudad de Lhasa sirve como un amuleto de buena suerte para todo tipo de propietarios, sean tibetanos o no. Será capaz de hacer felices a todos con su alegría, su coraje y su gran facilidad de adaptación. El Terrier Tibetano es un perro maravilloso, fácil de amar y adoptar.
Este perro está dotado de un excelente carácter. Le encanta acurrucarse y es muy cariñoso y afectuoso con toda su familia, ya sean grandes o pequeños.
Aunque no sea guardián, podrá advertir, pero no irá más allá, puesto que es incapaz de la más mínima agresión. Aunque sea muy cariñoso, permanece muy reservado con los extraños.
Leal, enérgico, vivaz, sociable e inteligente, el Terrier Tibetano es un excelente compañero para todo tipo de propietarios.
Inteligente, pero a veces un poco testarudo, una buena educación suave y firme contendrá esta ligera terquedad, para evitar así que se vuelva demasiado desobediente.
A pesar de su tamaño ligeramente menor que el promedio, el Terrier Tibetano es muy robusto. Tienen una forma bastante cuadrada y un aspecto muy determinado. Recuerda al aspecto de su primo tibetano, el Lhasa Apso.
Entre 35 y 40 cm (13.78 y 15.75 pulgadas) para el macho
Entre 35 y 40 cm (13.78 y 15.75 pulgadas) para la hembra
Entre 8 y 13 kg (17.64 y 28.66 libras) para el macho
Entre 8 y 13 kg (17.64 y 28.66 libras) para la hembra
El pelaje puede ser tricolor o multicolor (de varios colores). Puede variar entre el blanco, el crema, el dorado, el gris y el negro. Todos estos colores pueden estar combinados pero el color chocolate o granate no caracterizan a esta raza.
La capa superior larga es fina y muy abundante. Su pelaje, puede ser ondulado o liso, pero no es rizado. El subpelo es lanudo y fino también.
La cabeza tiene un cráneo de longitud media con un stop (depresión frontonasal) marcado. Los grandes ojos son redondos y de color marrón oscuro. Las orejas tienen forma de V y cuelgan cerca de la cabeza.
La nariz es negra. La cola de longitud media está bastante tupida y esta es llevada alegremente enroscada sobre la espalda.
Según la FCI, esta raza pertenece al grupo 9, a la sección 5 y al número #209
El Terrier tibetano puede vivir casi en cualquier lugar. Será feliz tanto en un apartamento como en una casa grande.
Puede vivir también en el exterior, pero como es un excelente compañero alegre y lleno de energía, es agradable estar a su alrededor en el interior y disfrutar de su gran alegría de vivir.
Puede convertir un día triste en uno corto y ameno gracias a su constante alegría.
Asimismo, es un excelente compañero de vida para los ancianos, ya que el paseo diario puede ser más que suficiente para él o ella, y podrá alegrar el día de la persona que lo acompaña.
El Terrier Tibetano es fácil de educar y muy fácil convivir con él. Una educación firme pero suave evitará que se convierta en un perro obstinado y lo convertirá en el mejor compañero posible.
De construcción sólida, es muy robusto y rara vez se enferma. Ninguna patología en particular afecta a este ex pastor.
Puede soportar fácilmente los inclemencias del tiempo, y no le teme al frío ni al calor. Su salud es generalmente excelente, y está dotado de una gran longevidad.
CUIDADOS
Su pelaje requiere un cepillado diario para evitar que se formen nudos en su fino cabello.
También se recomienda bañarlo cada dos o tres meses para mantener su pelaje sano. Sus ojos también deben ser vigilados y limpiados regularmente.
Conocidos en el Tíbet desde hace siglos, los terrier tibetanos son una raza de perro con orígenes muy antiguos.
Utilizado en su momento como pastor y como guardián de la ciudad de Lhasa, fue entonces adorado por los monjes de las lamaserías. El Terrier Tibetano es una de las cinco razas de perros tibetanos junto con el Lhasa Apso, el Shih Tzu, el Spaniel Tibetano y el Mastín Tibetano.
Los primeros son considerados como perros de compañía, exceptuando el Mastín Tibetano, que es considerado más bien como parte del grupo de los molosos.
Avisador de peligro, protector de la ciudad, perro pastor y perro sagrado, el Terrier tibetano es por lo tanto muy versátil en su país, y es considerado un amuleto de buena suerte por los tibetanos.
De ser un perro pastor en su país de origen, se ha convertido en un perro de compañía muy apreciado y muy buscado en el continente europeo.
La raza experimentó un particular auge después de la cría creada por la Dra. Agnes Craig alrededor de 1922. Recibió un par de perros como agradecimiento por sus buenos servicios, y decidió traer los dos perros regalados con ella a Europa. Así comenzó su propia cría en Europa. El estándar del Terrier Tibetano fue creado en 1930 y la cría en territorio francés comenzó alrededor de 1975.
En un primer lugar, era un perro pastor, un perro guardián u otro, sin embargo, hoy en día se utiliza principalmente como perro de compañía, pero es considerado todavía como un perro sagrado en su país.
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